21. para tí que lo mereces


No pensaba escribir nada de esto, porque es tuyo, tuyo, pero luego he creído que te gustaría leer mis pensamientos sobre ello, ahora tranquila, nadie sabrá quien eres.

Se ha acabado, ya no le han dado más margen a su relación. Otra vez el corazón en paro.

Le he dicho que se veía venir, pero nadie que lo ha vivido lo ha visto venir jamás, o si lo ha visto venir lo ha negado aunque lo tuviera delante.
Nunca podemos estar seguros de que algo será "para siempre", pero la idea es luchar porque sea así, el caso, es que hay veces que la lucha está perdida antes de empezar la batalla, bien porque no hay caso, bien porque el caso no quiere luchar.
El asunto es que tienes que sobreponerte, como en la foto, reconstruye tu corazoncito, hazlo mejor y más bonito.

Si alguna vez necesitas algo, 
       una palabra, un gesto, 
       dame un silbidito, 
      estaré ahí por tí, 
    gracias a tí.

7 comentarios:

Eingel dijo...

(ante cosas asi no puedo decir nada)

Txispas dijo...

Eingel: hay veces que eso es lo mejor que puedes hacer, cuando a esa persona ya le has dicho todo varias veces.

Anónimo dijo...

Mi corazón ya camina sin muletas, aunque tiene un vendaje en un brazo y una tirita en una oreja. Yo creo que falta muy poquito para que abra la puerta de su casa y reciba nuevas amistades. Me hace ilusión pensar que quizás entonces entre en él para-siempre. Muchas gracias por todo.

Txispas dijo...

Raquel: Me alegro de que te haya hecho sentir bien. ¿Has pensado que Eingel y tú teneís los mismos problemas "parejiles/amorosos"? Yo veo un futuro acercamiento vía comentarios...... jajajaja

Félix Amador dijo...

Escribir ayuda a comprender lo que no se puede entender con el pensamiento, que suele enredarse.

Es muy bonito pero muy difícil lo que cuentas. ¿De modo que el paro afecta también a los corazones? Que no se entere el gobierno o le da más dinero a los bancos (y bancos de sentimientos no hay, que es un bien tan efímero y volátil.....)

Anónimo dijo...

Lo siento, yo llevo en ese estado de perder batallas desde la guardería, pasando por todas las que me cruzo en el ascensor cada día.

Firmado: un perdedor de batallas con el corazón en paro.

Txispas dijo...

Félix: pues sí, qué se le va ha hacer, un corazón está en paro cuando sólo late por y para uno mismo.

Edu: alguna batalla habrás ganado o no estarías aquí, ¿no te das cuenta?